Existen varias formas de evitar que las sales de carbonato de sodio se formen actuando directamente sobre la fórmula de jabón o detenerlas en las primeras horas de enmoldado.

Las sales de sulfatos son muy raras y se forman si has utilizado agua de grifo o de otra fuente mineralizada o una sosa cáustica de baja pureza, necesitan muchos días para completar la cristalización y gran tamaño como logran algunas.

Si bien el carbonato de sodio se forma habitualmente solo en superficie, en mi experiencia, he notado que puede penetrar más en los jabones que reúnen varios factores. No es habitual pero a veces la ceniza aparece dentro del jabón dando una textura frágil, quebradiza y porosa.

Estos factores pueden ser:

• agregado de arcillas o pigmentos o sal
• una concentración por debajo de 30%
• una temperatura de saponificación por debajo de 35º C.
• agregado de extractos o líquidos con abundante concentración en taninos.

Seguro que muchos de estos factores te suenan, porque se buscan intencionadamente cuando se trabajan técnicas decorativas de swirl o marmolados. Los taninos pueden ser adicionados cuando se agrega vino tinto, por ejemplo. En el jabón de la siguiente imagen, se pude ver su textura porosa tipo piedra pómez de un jabón de vino y la ceniza del carbonato por todo su interior.

1- Controlar la concentración

Es la mejor forma de evitar que aparezca. Si puedes subir la concentración de tu lejía por encima del 33 % y hasta un 40%, minimizarás el riesgo de que se forme carbonato de sodio. Trabajar con descuento de agua te dará un jabón con mejor aspecto y sin ceniza, la pérdida de agua es mínima lo que mantiene fiel su peso y textura y también evitas que se formen ríos de glicerina. Además de ello, con concentraciones cercanas al 40% el jabón se curará más rápidamente.

En el siguiente jabón de chocolate con 28% de concentración puede verse su textura más grumosa y la ceniza en la superficie. No confundas la concentración de la lejía (NaOH:agua)  con el ratio de agua sobre los aceites.

2- Controlar la temperatura

Otro de los factores que evita que se forme carbonato es la gelificación del jabón. Cuando el jabón pasa por esta etapa, no queda sosa para reaccionar con el CO2 del aire.  Si trabajas con temperaturas bajas y concentraciones altas, utiliza la técnica CPOP para que el jabón gelifique. CPOP significa Cold Process Oven Process, esto quiere decir que una vez enmoldado tu jabón, lo obligues a gelificar dentro del horno, con un calor bajo y controlado.

3- Utiliza alcohol

Pulverizar la superficie del jabón con alcohol de 96º o con alcohol isopropílico ayudará a evitar su formación. Debes pulverizar el jabón al momento de verterlo en el molde y ya hayas logrado la superficie que desees. Luego lo vuelves a pulverizar después de 15 a 20 minutos. Tapa el jabón y mantenlo caliente para que logre gelificar. Si el jabón está por debajo de los 30ºC o la habitación está muy fría, puedes forzar la gelificación con el método CPOP. Esta opción es sumamente útil para aquellos jabones que llevan elementos decorativos sobre su superficie. Teóricamente el alcohol forma una película sobre la superficie del jabón y cataliza la reacción ayudando a que la sosa superficial se una a los ácidos grasos en vez del CO2.

4- Sellar la superficie

Si tu jabón es sencillamente plano sin diseño, una vez enmoldado puedes cubrir la superficie con un trozo de papel encerado de horno o con film de alimentos, para evitar que el aire haga contacto. Una vez sólido, podrás desmoldarlo y quitar el papel, luego lo cortas y pones a curar.

5- Agregar cera

Agregar a la fórmula un pequeño porcentaje de cera de abejas ayuda a recubrir la superficie del jabón con una película muy delgada y controla la exposición al CO2. Puedes agregar un mínimo de 0,5% para obtener algún resultado. Para trabajar cera de abejas debes ser un jabonero con experiencia, ya que se trabaja con temperaturas altas. Este método no lo he comprobado, pero muchos jaboneros lo mencionan como válido.

6- Utilizar agua destilada

Para que los sulfatos de sodio no aparezcan en tu jabón, solo utiliza agua destilada para saponificar y sosa de buena calidad, en lo posible de 98 -99% de pureza.

Si con todos estos tips el jabón eventualmente produce carbonato, puedes quitarlo como explico en el post anterior, lavándolo, con vapor o rebanado la superficie.

Espero que estos consejos te ayuden en tu camino jabonero.

Hasta pronto.

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